Un acontecimiento puede tener varias percepciones y estas pueden originar distintas actitudes. La forma como percibes el mundo condiciona tu manera de ver las cosas y reaccionar ante ellas. Por ello, ciertos eventos nos generarán frustración, rabia e impaciencia, mientras que otros reaccionarán de un modo diferente. Como resultado, no vemos el mundo tal y como es, lo vemos tal…